La asignatura optativa se presentó por primera vez en la facultad de medicina de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) en abril del año pasado y fue aprobada con unanimidad del Concejo Directivo, pasando todas las instancias democráticas. Sin embargo la polémica surgió cuando la noticia llegó a los medios y con ellos a la sociedad, colapsando la casilla de correo del decano, el Dr. Ricardo Nidd, con al menos 10.400 correos de repudio. En contrapartida cientos de organizaciones de DDHH y particulares juntaron firmas en change.org y enviaron casi 3.000 correos de apoyo en un día. Las redes se volvieron un gran foro dejando a la vista una sola realidad: el aborto ya no es tabú, la sociedad quiere hablar.
Ante la situación CLASEP logró entrevistar a la Médica Clínica Raquel Tizziani responsable de la nueva cátedra, junto a María Paula Bota, preguntándole sobre la misma.
¿Por qué decidieron tomar al aborto como una problemática de la salud?
En la materia se hablará de aborto como un problema de salud que en general queremos evitar. Las estadísticas de los principales organismos internacionales, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), calculan que en el mundo hay al menos 22 millones de abortos inseguros al año y en Argentina entre 350mil y 500mil, ocupando un 20 por ciento de la tasa de mortalidad de mujeres gestantes. Argentina se había comprometido a disminuir el número a la mitad y no lo ha logrado, tenemos una situación de salud grave y una ley que nos responsabiliza como profesionales de la salud junto a un protocolo de acción a nivel nacional para seguirlo. ¿Qué está pasando que todavía no lo aplicamos desde la formación médica?
¿Cuál es la normativa legal que obliga a las y los médicos a capacitarse sobre aborto?
Al marco legal le dedicaremos el primer módulo de la asignatura ya que lo deben conocer y garantizar. Resumidamente podemos decir que desde 1921 nuestra Ley incluye al aborto dentro del código como no punible ante dos causales (Art. 86). En el año 2012, partir del ejemplar fallo F.A.L., el código se reinterpreta creando un ¨Protocolo de atención integral de las personas con derecho de la Interrupción legal del embarazo (ILE) ¨. De esta manera toda mujer tiene derecho a solicitar ILE cuando: representa un peligro para su vida y/o su salud; cuando el embarazo es producto de una violación y cuando proviene de una violación de una mujer con discapacidad intelectual.
¿Cómo será el programa de la materia?
La materia está habilitada sólo para estudiantes que estén en ciclo clínico y podrán inscribirse mediante el sistema Guaraní. Tendrá una capacidad de ochenta estudiantes y comenzará el próximo cuatrimestre. El primer módulo abordará el marco legal vigente que respalda y responsabiliza a cada profesional de la salud a garantizar ILE. El segundo se va a denominar ¨aborto seguro¨ dedicado a la consulta médica; el tercero abordará teóricamente las ¨prácticas y procedimientos¨ para garantizar la interrupción legal.
El cuarto módulo se centrará en la atención integral post aborto entendiéndolo como un problema de salud prevenible. Por ello se trabajará sobre anticoncepción, determinación, evaluación y abordaje de situaciones de violencia junto a infecciones de transmisión sexual. El último módulo cerrará la temática con actividades participativas a modo taller.
¿Qué opinan sobre la repercusión que tuvo la cátedra?
La autonomía universitaria no es negociable. No hay posibilidad de que la cátedra retroceda. Nos parece muy positivo que el aborto vuelva a la agenda mediática y se discuta. Si bien la campaña por el aborto lleva doce años presentando el sexto proyecto de ley, nunca llegó a tratarse realmente en las cámaras. Sería muy interesante que este proyecto pedagógico demuestre que sí hay discusión social.
¿Desde qué perspectiva hay que abordar al aborto?
Al aborto como problema de salud hay que abordarlo desde una perspectiva de género con justicia social ya que hay una gran pata que se relaciona con el negocio del aborto clandestino. Estamos formando a médicos(as) que lo hacen dentro de este ámbito cuando es totalmente ilegal, hablamos de justicia social porque las mujeres que mueren son aquellas que no tienen la posibilidad de pagar y acceden a prácticas inhumanas. Debemos terminar con esto.